LA PRUEBA PILOTO SE ANALIZÓ EN EL CONSEJO DE LA NIÑEZJóvenes mediadores resuelven casos de violencia escolarLa presentación de un proyecto juvenil de mediación que se está realizando en Puerto Madryn y la problemática de la trata de personas, fueron los temas centrales de la XXVI Reunión Plenaria del Consejo Provincial de la Niñez, Adolescencia y Familia (CONAF), que deliberó en las instalaciones de la Secretaría de Cultura de la ciudad de Rawson. El secretario Daniel Rodríguez, se refirió al temario del encuentro, asegurando que concentraron la atención “en la posibilidad de sumar la participación de los jóvenes al Consejo. Buscamos formarlos dentro del marco de las propuestas y sugerencias respecto al tema social”.Asimismo en la localidad de Puerto Madryn se realizó una exitosa prueba piloto, donde un grupo de jóvenes que se denominan “Tutores, Asistentes y Monitores Auxiliares Adolescentes (T.A.C.M.A.C), trabajan en el colegio para resolver problemas de violencia escolar”, aseguró Rodríguez.Estos 120 jóvenes desarrollaron un arduo trabajo en tal iniciativa por lo cual “tuvieron la posibilidad de ir a exponer en un encuentro nacional a Bueno Aires lo que hacen, y aceptaron describir su tarea en este plenario provincial”, indicó el funcionario gubernamental.Cabe señalar que de la reunión participaron “consejeros provinciales, del Poder Ejecutivo, otros provenientes de las distintas Municipalidades y finalmente consejeros que pertenecen a las ONG”, afirmó Rodríguez. Resolver problemas Por su parte el Coordinador de TACMAC, Rubén Andrada, manifestó que en el proyecto nació de las “inquietudes que ellos pudieron reflejarme como un grito silencioso, querían hacer algo pero no teníamos las herramientas necesarias para comenzar”.En esta iniciativa los chicos cumplen el rol de conocerse y autoevaluarse, para que puedan expresar a la sociedad todo lo que saben. “Ellos son muy objetivos a la hora de resolver los problemas de la sociedad”, afirmó el profesor Andrada.El objetivo del proyecto es que ellos puedan mediar situaciones problemáticas verbales o físicas, en tal sentido Andrada señaló que su función es “orientar y enseñarle lo que sabemos para hacerles llegar bastantes talleres con la ayuda de otros compañeros que se acercaron en este camino para ayudarlos a subsistir”.Espacio de proyecciónAsimismo el responsable indicó que los adolescentes se muestran inquietos por la situación que viven en lo cotidiano, “muchos chicos están perdidos, pero trabajando en equipo y de forma mancomunada con las familias podemos salir adelante poco a poco. Cuesta mucho, es un trabajo muy arduo y responsable, pero no es imposible”.“La escuela es una herramienta que hay que saber utilizar. La parte educativa hoy está muy difícil pero hay que hacerles entender que es el espacio para que los adolescentes se puedan recrear, expresarse y proyectarse a futuro”, aseguró Andrada.

Fuente: www.diariodemadryn.com

Impulso a la figura del alumno mediador

Es para atender problemas de violencia escolar. El aporte de un compañero surge como alternativa.

Para los adolescentes la visión y la opinión de un par (previamente capacitado) puede ser más atendible que la de un adulto.

NEUQUÉN (AN).- Dos alumnos se pelean en el aula, como puede ocurrir cualquier día en cualquier escuela. Un tercer estudiante, tal vez compañero de ellos, que ya recibió una capacitación previa, interviene horas o días después, para ayudarlos a resolver el problema que hizo eclosión entre ambos.
El ejemplo anterior sintetiza lo que ya ocurre en instituciones educativas de la provincia. Se trata el programa de alumnos mediadores, que ya comenzó a proponerse a docentes, directivos y supervisores, en el contexto de un plan nacional, como una alternativa componedora para los emergentes de la violencia dentro del aula.
"Sobre todo en la adolescencia, la palabra de un par, de otro adolescente, tiene una vital importancia. Y puede permitir superar escollos y prejuicios que tienen sobre el mundo adulto los jóvenes", afirmó Patricia Mathiu, la directora del Centro Único de Capacitación Educativa y Tecnológica, del Consejo Provincial de Educación (CPE).
El programa, que ya cuenta con antecedentes a nivel nacional, y en otros países, como España, funciona a través de una capacitación previa a las autoridades y maestros.
"Son ellos los que deben identificar cuáles son los alumnos que pueden reunir condiciones que les posibiliten intervenir en una instancia previa a la resolución de los problemas", afirmó Mathiu.
Lo siguiente es ofrecer "más herramientas" a estos estudiantes, de modo que puedan, si quieren, ser artífices de la conciliación dentro del curso.
El programa surge en medio de las capacitaciones que el Consejo comenzó a ofrecer en distritos de toda la provincia, a partir del año pasado, ante el surgimiento de fenómenos violentos que hasta ahora eran inéditos, como la utilización de tecnología e internet para socializar la violencia dentro del aula.
Mathiu señaló que en las escuelas donde se aplicó, algunas de ellas de la capital provincial, el plan obtuvo "muy buenos resultados".
Puertas adentro de la institución educativa, una de las posibilidades del programa es la de atenuar los prejuicios, que en ocasiones prevalecen entre el alumnado, ante la figura de autoridad, en crisis dentro cuanta institución educativa se tome.
"Si bien la figura del docente siempre está presente, el programa permite una descompresión para lo que viene luego de un conflicto. La participación de un compañero, o de un par de la misma generación, ofrece otras alternativas de la recomposición de un vínculo mediante la palabra. Esto muchas veces permite acortar los caminos para la supresión del problema", dijo Mathiu.

Fuente : www.rionegro.com.ar

MEDIACION ESCOLAR.

Quienes desde hace algunos años transitamos las instituciones escolares, advertimos cómo la violencia y la intolerancia crecen día a día. Ya no nos sorprendemos con las reacciones de nuestros alumnos, la prepotencia de algunos padres culpabilizando a los docentes de los problemas de disciplina y de aprendizaje de sus hijos, la indiferencia de las autoridades, pero lo realmente grave es que lo que “antes” ofrecía soluciones, hoy son medidas inocuas.
Muchos progenitores “rompieron la alianza”, ignoran las normas institucionales, no acompañan las medidas tendientes a poner límites, sino que las cuestionan y los docentes tenemos dificultades para desarrollar las clases en un clima armónico, porque muchos alumnos molestan, agreden, faltan el respeto, se pegan entre ellos, Ante este escenario la Mediación Educativa propone un modo alternativo para abordar el conflicto en la escuela, que exige pensar “desde otro lugar”. Esto consiste en un procedimiento de resolución de conflictos desde el tercero, neutral, que no tiene poder sobre los disputantes , ayuda a que éstos en forma cooperativa encuentren una solución a su disputa. La Mediación genera tiempo de reflexión , de análisis para intentar comprender la posición del otro, en miras de anular las diferencias que separan y que impiden la resolución del conflicto.-
Cada Escuela desde su particularidad percibe que se deben enfrentar los conflictos y pensar estrategias institucionales que puedan poner en estado activo al diálogo ,accionar que es necesario para fortalecer la ciudadanía y vivir sanamente en sociedad.-
Son tiempos de grandes y vertiginosos cambios y en consecuencia de desafíos y enfrentarlos nos exige coraje , compromiso y coherencia, entre nuestro “decir” y nuestro “hacer”, más allá del aula.

La violencia es hoy un componente cotidiano en nuestras vidas. Es una manifestación que ocurre en todos los niveles sociales, económicos y culturales. Esta se ha puesto de manifiesto también en las instituciones. Dicha violencia fue ocultada, negada y silenciada durante muchos años por educadores y autoridades, pero evitar y suprimir esos actos violentos no ha hecho más que empeorarlos.Debemos enfrentarnos a esta problemática que aumenta día a día. Enfrentarlos significa reconocerla, analizarla y actuar sobre ella, esta es una manera de trabajar en prevención.El problema debe ser tomado sin dramatismo, pero con firmeza y en toda su magnitud. Debemos evitar el miedo y la angustia que la violencia produce para no caer en la impotencia y actuar desde una postura reflexiva que nos permita encarar abordajes acordes a su complejidad.